De los ojos el brillo de la viveza
Del pelo la finura de los calmados vientos
De la piel la tersura de los cielos
De toda tú, todo
El nacar de tus dientes al mar fue robado,
El verde del campo en tu mirada fue colocado,
El brillo del sol en tu superficie fue anidado,
La ternura de la infancia en tu rostro se ha plasmado.
Eres un mundo en ti misma,
tus montes, tus valles y tus mesetas,
tus bosques, tus tundras y tus selvas,
hace de tus continentes un enigma y una proeza
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Gracias por el interés en las letras amorosas de la poesía.