sábado, 27 de junio de 2009

PUNTA DE ALFILER

Qué decir de un amor intenso que se antoja infinito,
Cuando parece tan incomensurable que nada lo abarca,
Y es tan grande que es capaz de concentrase en un grano de arena,
En la punta de un alfiler, en un grano de mostaza.

Pero, también, qué decir cuando ese amor destroza,
Que de tanto sentir el corazón se parte y se vuelve insensible,
Que el objeto de nuestros deseos deviene en inalcanzable,
Por objeto de orgullo y cobardía.

Cómo comprender que ese amor, pese al sufrimiento, se diluya,
Siendo un campo fértil, lleno de vida y posibilidades,
Cómo explicar su erosión,
Cómo reconocer que de su gigantesco tamaño
Se haya reducido a un amor eterno.

Qué hacer cuando las circunstancias te rebasan,
Te dejan atrás en la carretera de los sentimientos,
Porque estás maniatado y sin impulso que te lleve
A buscar por lo menos el consuelo de la esperanza.

¿Cómo imaginar que algo tan grande devenga en algo tan sencillo?

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Gracias por el interés en las letras amorosas de la poesía.